sábado, 1 de noviembre de 2014

BULLYING EN NUESTRA INSTITUCIONES EDUCATIVAS


BULLYING EN NUESTRAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS

José Ramos Flores

Desde tiempos remotos las escuelas y los colegios son consideradas como el segundo hogar de los niños y jóvenes escolares, pues allí conviven con sus pares y tienen como sus segundos padres a los profesores. Sin embargo, en los últimos tiempos esta situación viene cambiando, muchas de nuestras Instituciones Educativas han dejado de ser lugares seguros para los niños, pues en ellas se han venido reportando casos de violencia escolar que llama mucho nuestra atención.

Los frecuentes casos de violencia escolar, ha hecho que los padres de familia comiencen a preocuparse sobre la situación de sus hijos en las escuelas públicas y privadas, sobre los efectos negativos de la violencia en el bienestar de los niños, así como en el logro de sus aprendizajes.

Como muestra tenemos las estadísticas del Ministerio de Educación, quienes señalan que en los 9166 Instituciones Educativas estatales y particulares afiliados al Sistema de Reporte de casos sobre Violencia Escolar (siseve.com) del Ministerio de Educación[1], 803 estudiantes han denunciado ser víctimas de acoso escolar o bullying, ello implica que cada día unos 30 estudiantes son insultados, golpeados, abusados sexualmente o humillados por otros compañeros. Esta situación se corrobora con las múltiples denuncias que se ve en los medios de comunicación: radio, televisión, revistas y periódicos.

Conforme al artículo 13° de nuestra Constitución, “la educación tiene como finalidad el desarrollo integral de la persona humana”. Asimismo en su artículo 14° señala que la educación “prepara para la vida y el trabajo y fomenta la solidaridad”. Entonces ¿Qué está pasando en nuestras escuelas? En medio de violencia escolar ¿Cómo se fomenta el desarrollo integral de nuestros niños y jóvenes? ¿Dónde quedaron los valores? ¿Qué está fallando? ¿Será que la acción del Estado es muy poco, será que en nuestras Instituciones Educativas se está perdiendo ese espíritu educador, será que las familias ya no están cumpliendo su rol de inculcarles valores humanos y espirituales, será que los medios de comunicación están influyendo de manera negativa en el comportamiento de los niños y jóvenes?

Podemos continuar haciéndonos múltiples preguntas. Sin embargo, el problema de la violencia escolar, más específicamente del acoso escolar o bullying no es sino el resultado de la combinación de todos estos factores: Fallas en el sistema educativo, en las escuelas, en la familia, en los medios de comunicación, en la población en general. Como ejemplo, la atención que brinda el Estado a este problema no es nada alentador, como ha señalado el diario El Comercio en una de sus publicaciones, en ciudades como Piura, Arequipa y Chiclayo, los psicólogos dedicados a prevenir y tratar casos de violencia escolar no supera de 10 en cada una de ellas[2]. Entonces ¿cuál es la solución que el Estado y la sociedad peruana que da a esta problemática? ¿Cómo proteger los derechos fundamentales de estos menores que sufren los efectos del bullying?

Por otro lado, tenemos muchas familias carentes de valores, familias que más están interesados en la fama y la riqueza, a quienes poco les importa la unidad y la integridad familiar, cuyas consecuencias están sufriendo sus hijos y muchos de ellos están descargando la ira y la rabia contenida con otros niños, y en otros casos, sumidos en la tristeza y la preocupación, soportan los abusos de otros, pues para ellos la vida ya no tiene sentido. También tenemos que muchas Escuelas y Colegios ya no tienen interés en el aprendizaje y el bienestar de los niños, sino en el beneficio que obtienen a través de las escuelas, así también tenemos profesores, mayormente a causa de la mala remuneración, prefieren buscar su sustento en otras actividades, interesándose ya menos por el bienestar de los estudiantes. A ello hay que sumar la nefasta influencia de los medios de comunicación, que lejos de educar e inculcar valores humanos en la población, entre ellos los escolares, transmiten programas indecentes, programas que propician la discriminación, la cosificación y la práctica de antivalores como chismes, murmuraciones, críticas negativas, infidelidad, competencia desleal, etc. De igual manera a nivel de nuestra sociedad a diario vemos abusos, corrupción, competencia desleal, etc. Todo ello ha hecho que nuestro niños, sin querer absorban todo lo negativo y exterioricen en violencia contra sus pares.

Sin embargo, en medio de todo ello, aún tenemos muchas personas, familias, instituciones públicas y privadas que se mantienen íntegros, que son ejemplos que imitar. Conjuntamente con ellos hagamos fuerza común para luchar por los derechos de estos niños y jóvenes que sufren los efectos negativos del bullying. No olvidemos los valores que sostienen a la humanidad. No hay otra manera de vencer, practicando los valores, respetando los derechos de los demás, no haciendo a los demás lo que no quisiéramos que hagan con nosotros.

El bullying está en nuestras escuelas, es nuestra tarea desterrar. Todos podemos apoyar, tan solo tenemos que practicar los valores y respetar los derechos humanos de cada uno de nuestros prójimos.

 




[1] El Ministerio de Educación ha puesto en funcionamiento del Sistema Especializado en Atención de Casos sobre Violencia Escolar, cuya página Web se puede revisar en: http://www.siseve.pe/
[2] Diario El Comercio. Publicación de Fecha 02 de mayo del 2014. Puede leerse en la siguiente dirección: http://elcomercio.pe/peru/pais/al-menos-30-ninos-al-dia-son-victimas-bullying-peru-noticia-1726649

EL TITULO DE LA INVESTIGACIÓN


EL TITULO DE LA INVESTIGACIÓN
JOSE RAMOS FLORES
Instituto de Investigación Jurídica Rambell de Arequipa

1.    GENERALIDADES

Cuando uno desea desarrollar un trabajo de investigación lo primero que debe hacer es recordar o tener en claro la razón de ser de una investigación. Una investigación generalmente se plantea con la finalidad de solucionar algún problema, pues, si no hay problema no habrá suficiente motivo para plantearnos una investigación.

En ese sentido, antes de pensar en formular el título de la investigación, tenemos que analizar bien el problema que deseamos investigar, sobre todo para evaluar si el problema es relevante y qué aportes plantearemos mediante nuestra investigación. Para ello necesitamos revisar la literatura relacionada con la investigación, los antecedentes investigativos y plantearnos tentativamente los objetivos y la hipótesis.

Cuando tenemos claro la idea de qué vamos a investigar, qué queremos lograr, donde y cuando efectuar la investigación, fácilmente formularemos el título de nuestra investigación.  Veamos a continuación sobre ello.

2.    TITULO DE LA INVESTIGACION

Como señala Balestrini (2006: 21), todo proyecto de investigación o de trabajo de grado, debe ser identificado con un título, que necesariamente deberá reflejar el área temática que se propone investigar. De allí pues, que el título pasa a ser una definición abreviada o reducida del problema que pretende estudiar. Por consiguiente, éste deberá cumplir con ciertos requisitos, relacionados con su delimitación y concreción, así como, con la claridad y transparencia de sus formulaciones.

Es muy importante cuidar la redacción del título de nuestra investigación, porque como señala Ramírez (2006: 46) el título es “una especie de envoltura de un producto, ya que es lo primero con lo que se entra en contacto el potencial consumidor del mismo”. Es pues el título lo que de primeramente observan las personas. A partir de ella pueden formarse la idea del contenido de nuestro trabajo, de su utilidad e importancia.

3.    REDACCION DEL TITULO DE LA INVESTIGACION

Aunque parezca sencillo, la redacción del título de la investigación no siempre es fácil. Muchas veces se cometen errores en la presentación de los títulos, ya sea en la redacción o la claridad de los mismos, es decir, a veces no se redactan correctamente desde el punto de vista del lenguaje y otras veces el título formulado refleja en realidad el aspecto central del tema de investigación.

Un buen título, como manifiesta Balestrini (2006: 21), “debe ser lo suficientemente preciso en cuanto a su contenido, en la medida que deberá reflejar, solamente, el ámbito del tema que se investigará”. De modo que, el título debe estar estrechamente relacionado con el problema de investigación, debe ser la forma concreta de contextualización y precisión del problema de investigación.

Concordando con Balestrini (2006: 22) podemos decir que es importante recordar que al enfrentarnos a la situación de formular un buen título para una investigación, se deberán considerar los siguientes aspectos:

·         Debe presentar realmente lo que se desea investigar.

·         Estar directamente relacionado con el objetivo general de la investigación.

·         Debe ser preciso y breve, por ello se recomienda que no abarque más de dos líneas. En el caso de que no sea posible formular un título corto por la dificultad de expresar en pocas palabras la idea que encierra la investigación proyectada, debe recurrirse al uso de subtítulos; en todo caso, se deben agotar todas las posibilidades para lograr un título de un máximo de dos líneas.

·         Se debe tener especial cuidado con el lenguaje empleado en la redacción del título de la investigación.

Al momento de redactar el título de una investigación es necesario tener en cuenta lo que plantea Julio Paredes (2006: 70), quien señala que el enunciado o título de nuestra investigación debe reflejar la relación de las variables que representan el contenido de nuestra investigación y responde a la pregunta ¿qué investigar?, la unidad de estudio ¿en quienes investigar?, la ubicación espacial ¿dónde investigar? Y la delimitación temporal ¿a qué cronología responde la investigación?

Similarmente, Bavaresco (2007: 49) plantea que al formular el título de la investigación “debe establecerse indicaciones sobre dónde y en qué época se va concentrar o concretar la investigación, por ello se hace necesario definir el espacio y el tiempo” (p. 49).

Ejemplo:

Intereses laborales de los estudiantes del doceavo semestre de la Facultad de Derecho de la Universidad Católica Santa María de Arequipa, 2014.

Variable                                      : Intereses laborales

Unidad de estudio                  : Estudiantes de la Facultad de Derecho

Ubicación Espacial                   : Facultad de Derecho de la UCSM

Delimitación Temporal         : 2014

 

BIBLIOGRAFIA

ARANZAMENDI NINACONDOR, Lino (2005). Diseño y Proceso de la Investigación Jurídica. Arequipa: Editorial Adrus.

BALESTRINI ACUÑA, Miriam (2006). Cómo se elabora el proyecto de investigación. Séptima Edición.  Caracas: BL Consultores Asociados. Servicio Editorial.

BAVARESCO DE PIETRO, Aurora Marina (2006). Proceso Metodológico en la Investigación: Cómo hacer un Diseño de Investigación. Quinta Edición. Maracaibo: EDILUZ.

HERNANDEZ SAMPIERI, Roberto, FERNADEZ COLLADO, Carlos y BAPTISTA LUCIO, Pilar (2008). Metodología de la Investigación. Cuarta Edición. México: Mc Graw Hill.

PAREDES NUÑEZ, Julio E (2006). Manual de la Investigación Científica. Sexta Edición. Arequipa: UCSM-EPG.

RAMÍREZ, Tulio (2007). Cómo hacer un proyecto de investigación. Caracas: Editorial PANAPO.